¿TERRITORIOS, HUELLAS Y MUNICIÓN?
PREGUNTA NÚMERO UNO.
En terreno montañoso, ¿cual de estos factores tiene mayor incidencia en la distribución territorial de los ciervos?
1) La presencia de agua.
2) El estado hormonal; de la manada.
3) La presencia de comida.
4) La presencia de mosquitos.
5) La ausencia o la presencia de refugio.
6) La temperatura ambiente y la presencia de nieve.
7) Todas las de arriba.
La repuesta correcta es la número siete; todas ellas. Los ciervos se hallan cómodos cuando la temperatura ambiente oscila entre los 7 y los 12 grados Centígrados. Cuando la misma sobrepasa ésta marca, los animales comienzan a emigrar hacia zonas más altas, huyendo del calor y de los mosquitos.
Pero recuerde que solamente emigrarán sí la zona a la cual se dirigen presenta comida, bebida y reparo. De ser así, tanto hembras cómo machos se mantendrán en las cotas más altas hasta bien entrado el otoño, para descender recién con las primeras nevadas. La corriente emigratoria ascendente comienza durante la primavera, pero la fecha varía según la latitud y la presencia de mosquitos o tábanos en las tierras bajas.
Cuanto más cerca de los polos, más tarde se da el inicio de la migración, y más temprano se producirá el descenso hacia los valles, aunque sí bien estas depresiones representan un refugio seguro contra las inclemencias del tiempo, la mayor cantidad de predadores se concentran en las mismas.
Las primeras nevadas fuertes obligan al cambio en las tácticas de caza, llevando la acción hacia las zonas más bajas del territorio, inclusive concentrando por las mañanas gran parte de la fauna en las dos laderas que primero reciben la luz solar. Estas son las caras Este y Norte para aquellos ubicados en el hemisferio Sur, y las Este y Sur para los cazadores del hemisferio Norte.
¿A partir de que fecha espera Ud. encontrar huellas de ciervos machos mayores de cuatro año, y por lo tanto probablemente cazables, indicándole que estos ya se hallan en grupos?
1) A mitad de la berrea o brama, justo entre la primera y segunda parte de la misma.
2) Inmediatamente de finalizada la berrea.
3) Al comienzo del invierno.
4) Cualquiera de las de arriba.
Durante la brama (berrea, ladra, etc, según la especie de cérvido y el lenguaje del país), los machos de todas las edades se mantienen alrededor de las hembras, tanto en la primera como en la segunda parte. Pero en éste caso las huellas de los machos se encuentran aisladas, ya que no se toleran entre sí. Por lo tanto, un grupo de huellas grandes encontradas durante la berrea son producto de las pisadas de las hembras.
Al comienzo del invierno, respuesta número tres, ya hace un mes y medio que los machos se encuentran agrupados en sus zona de invernada, de manera que ésta tampoco es la correcta.
La repuesta correcta es la segunda; exactamente a partir del día en que finaliza la segunda etapa de la berrea es cuando comenzaremos a encontrar grupos de huellas de machos conviviendo, y esto será en territorios alejados de los de las hembras.
Cuando la última hembra queda servida, indicando el final de la brama, y los niveles de estrógenos en sangre en las mismas descienden marcadamente, los machos se ven privados del estímulo sensorial que los mantenía junto a las manadas y separados entre sí.
A partir de ese momento pierden toda su agresividad para con sus congéneres del mismo sexo y aquellos de cuatro años en más vuelven a conformar los "clubes de solteros", que comúnmente agrupan a machos entre los 4 y 8 años de edad. Los machos mayores de 8 suelen permanecer en estos grupos, pero en ocasiones se tornan animales solitarios que viven completamente aislados de ambos grupos y sólo mantienen algún contacto con las hembras durante la berrea.
Por su lado, los machos de hasta tres años permanecen o con las hembras, o bien en las cercanías de las mismas, compartiendo los mismos territorios.
La importancia de éste descenso de los niveles de estrógenos de las hembras es que fuerza al cazador a aplicar una nueva estrategia de caza, muy diferente a la empleada durante la berrea y en terrenos también diferentes, ya que los machos dejarán de rondar a las hembras para dirigirse a sus territorios de invierno. Esto hace que la técnica más frecuentemente utilizada durante la brama, que radica en encontrar los campos de pastoreo pues a ellos acudirán las hembras y sus crías a comer, y adonde van las hembras siguen los machos, carezca de sentido.
Además de distanciarse de las hembras físicamente mudándose de vecindario, los ciervos se tornan completamente nocturnos y dedican casi el 100% de su tiempo a reponer la grasa perdida comiendo. Se vuelven más difíciles de ver durante el día manteniéndose en los más profundo de sus refugios, y pasan la mayor parte de las horas sin luz en los campos de pastoreo, a los cuales utilizan desde unos minutos antes de la caída del sol hasta muy tarde en la madrugada o hasta unos minutos después del amanecer.
Ud. posee un rifle recamarado para el .300 Winchester Magnum y desea utilizarlo para montear, esto es cazar en terrenos sucios donde los disparos son de cerca, al bulto y sin poder escoger demasiado el punto de impacto.
¿Qué tipo de puntas (proyectiles) escogería para presas de piel blanda y no peligrosas como los diferentes cérvidos y suidos?
1) Blindada, con cola de bote, de 180 grains de peso.
2) De punta hueca, cola de bote y núcleo de plomo blando (sin antimonio) de 165 grains.
3) Bala de 220 grains con punta redonda (con plomo expuesto) y cola de bote.
4) Una bala de 180 grains, punta redonda (con plomo expuesto) y base plana.
La primera alternativa representa una bala de guerra, que por su diseño en cola de bote está obviamente diseñada para largo alcance, y por su blindaje es una munición que no se deforma y resulta altamente perforante. Estos proyectiles carecen de un buen poder de detención.
La segunda respuesta corresponde a una bala diseñada para expandir rápidamente a bajas velocidades (larga distancia) y para ser utilizada únicamente en animales de piel fina, peligrosos ó no. A pocos metros, y a alta velocidad, ésta punta carece de un poder de detención aceptable, ya que estallará en superficie, produciendo solamente una herida superficial que no detendrá a la presa.
Las balas con nariz redonda y cola de bote no existen, ya que su diseño resultaría en una contradicción aerodinámica, desde que una nariz mocha ó redondeada produce pérdida de alcance por fricción.
La respuesta correcta entonces es la número 4. En estos casos (montería) se precisa de una punta lenta y pesada, capaz de expandir moderadamente y traspasar su energía a la presa cómo lo hacen las puntas de nariz redondeada, pero sin exponerse al peligro de estallar al contacto por la debilidad estructural que presentan las balas en cola de bote. En caza mayor, y siempre que pueda, escoja puntas de base plana, en particular sí el cartucho es de alta velocidad o la distancia de disparo es reducida. De ésta forma se asegurará una mayor penetración.